Estrategias para la implementación del manejo integrado de arvenses
Las coberturas vegetales disminuyen la escorrentía y la percolación, y son el principal agente de disipación de la energía de las gotas de lluvia y disminución de la erosión del suelo (AT, 190, AT 233). Por lo anterior, el Manejo Integrado de Arvenses (MIA) es la práctica más eficiente para la prevención de la erosión (97%) y por ello, como práctica bandera de conservación de suelos y aguas dentro de los sistemas productivos de café en Colombia se deben buscar opciones innovadoras para su implementación.
Esta implementación demanda un gran esfuerzo en la sensibilización y educación de la comunidad, ya que por muchos años ha existido la cultura en los agricultores colombianos sobre el manejo de sus cultivos con el suelo totalmente libre de arvenses (suelo desnudo) y es posible que con una sola capacitación o instrucción no sea suficiente para que el agricultor cambie su cultura, la cual se ha heredado de generación en generación.
Al comprender la filosofía del MIA que se basa en la importancia de la cobertura del suelo para prevenir la erosión, el MIA se podría implementar independientemente de las herramientas utilizadas para tal fin, como el caso del selector de arvenses (AT 206, AT 235, AT 271), herramienta muy útil para llevar a cabo el concepto del MIA; sin embargo, a pesar de su utilidad no es el eje central del MIA, ya que las bases están en interiorizar y comprender la importancia de la cobertura vegetal en la conservación de los suelos y aguas.
La utilización de un solo método de control siempre tiene dificultades debido a la especialización de las poblaciones de arvenses frente al mismo método (manual, mecánico, químico, cultural o biológico), como por ejemplo, la aparición de arvenses resistentes a herbicidas (AT 350). De este modo, la integración de diferentes métodos de control no asegura la implementación del MIA si esto no va acompañado de la filosofía de no desnudar el suelo.
El solo hecho de integrar diferentes métodos, por ejemplo, el control químico (AT 205, AT 359, AT 417) con selector de arvenses y corte con machete, no asegura que se haga el MIA, si esta actividad se realiza para desnudar el suelo. La aplicación del MIA no debe depender exclusivamente de la adopción de una herramienta sino de la interiorización de su concepto.
Estrategias para favorecer la práctica
Interiorizar la filosofía del MIA, que consiste en mantener el suelo con coberturas para conservarlo al igual que al agua, sin que se afecte la productividad y los costos de producción, lo cual se logra al disminuir la proporción de las poblaciones de arvenses agresivas (AT 333, AT 427) y favorecer las de fácil manejo y mediana y baja interferencia con el cultivo (AT 237) o coberturas nobles (AT 151).
Siete estrategias para la implementación del MIA
1. La interiorización y apropiación de la filosofía, las estrategias y las herramientas del MIA (AT 204, AT 205, AT 206, AT 235, AT 271, AT 359, AT 417) por parte del Extensionista es de suma importancia para transmitir un mensaje seguro y confiable.
2. La sensibilización y educación (AT 233) del agricultor, su familia, administrador y trabajadores es el primer paso para la implementación del MIA.
3. Superar la dificultad en el reconocimiento de las arvenses (AT 237, AT 333) por su grado de interferencia. Acercar a los cafeteros con las arvenses, construyendo con ellos un listado de aquellas más agresivas y nobles en la empresa, cuenca o vereda.
4. Abordar el tema de los costos del MIA (AT 259, AT 359). Los costos siempre serán una inquietud y limitante para que el cafetero emprenda la adopción del MIA, al igual que las demás prácticas de conservación de suelos y aguas que se implementen. Se debe demostrar la rentabilidad y efectividad del MIA en el tiempo. La evaluación y el seguimiento de los costos de las desyerbas y la implementación de lotes vitrinas donde se validen los costos del MIA frente al manejo tradicional, puede ser una estrategia que contribuya en su adopción.
5. Análisis integral sobre el efecto del MIA en la productividad (AT 87, Revista Cenicafé 60(02)126-134). La duda sobre el efecto de las coberturas en la producción también puede ser una barrera para la adopción del MIA, como práctica de conservación de suelos y aguas, tema que ha sido investigado y donde no se han encontrado diferencias desfavorables en la producción al adoptar el MIA.
6. Superar las dificultades con el uso de las herramientas para el MIA (AT 204, AT 205, AT 271, AT 359, AT 417). Apropiación y acercamiento al selector de arvenses (AT 271).
7. Abordar la implementación del MIA en diferentes sistemas de producción de café (AT 307, Revista Cenicafé 58(3):227-235).
Luis Fernando Salazar Gutiérrez
Centro Nacional de Investigaciones de Café - Cenicafé
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