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  Nuestras Publicaciones/ Avances Técnicos

  Es una publicación con información científica y tecnológica, derivada de los procesos de investigación y que se utiliza como herramienta básica por el Servicio de Extensión de la Federación Nacional de Cafeteros en su labor de asistencia a los caficultores.

La mancha foliar de los cítricos en la zona cafetera. (avt0198)

La enfermedad conocida como mancha foliar o mancha café de los cítricos se detectó por primera vez en la región cafetera colombiana en árboles de tangelo Mineola, en el sur del Departamento del Quindío a finales de 1980. Inicialmente esta enfermedad no se consideró de importancia económica, puesto que su presencia esporádica y muy localizada permitió un aparente manejo, gracias a la aplicación de fungicidas. Sin embargo, su dispersión, incidencia y severidad se ha incrementado gradualmente a tal punto que en 1993, prácticamente el 90% de los cultivos de tangelo de los Departamentos de Caldas, Risaralda, Quindío y Norte del Valle fueron afectados con intensidades moderadas a severas. Los síntomas de esta enfermedad se caracterizan por la presencia de lesiones de color café, de diferente tamaño, principalmente en ramas tiernas y en frutos jóvenes, aunque en ataques severos tanto hojas como frutos maduros también son afectados. La presencia de esta enfermedad está estrechamente relacionada con alta humedad o lluvia frecuente y temperatura entre 25 y 28°C, que al coincidir con estados vegetativos susceptibles, determinan que el patógeno genere abundante inóculo el cual al ser diseminado por el viento y la lluvia, ocasiona ataques severos. En las condiciones climáticas del trópico, se dan todos los factores favorables para el desarrollo de /Alternaria/ sp.; la presencia de brotes nuevos, floración y formación de frutos durante todo el año, constituyen una condición propicia para el desarrollo permanente de epidemias. En siembras en medio de cultivo (PDA) se aislaron en forma recurrente los hongos /Colletotrichum/ sp. y /Alternaria/ sp., los cuales se obtuvieron conjuntamente o en forma separada, de las lesiones procedenes de hojas, tallos y frutos. Dos días después de la inoculación se observaron las primeras lesiones necróticas en hojas y en tallos, así como la defoliación característica. Unicamente las plantas inoculadas con el hongo /Alternaria/ manifestaron síntomas de necrosis en hojas y tallos y defoliación característica de la enfermedad. Se plantean algunas alternativas para el manejo del problema, con base en revisión bibliográfica sobre sistemas de control en países cítricolas donde la enfermedad está presente: 1. En plantaciones con ausencia del problema, o en siembras nuevas, se debe asegurar la sanidad del material a plantar, puesto que las plántulas pueden llevar el patógeno desde el vivero. 2. Mantener buen control de malezas y drenaje adecuado en lugares donde se presenten encharcamientos, con el fin de disminuir humedad. 3. En huertos con altas densidades de siembra entresacar árboles para favorecer aireación y disminuir humedad relativa. 4. Durante época de formación de nuevos brotes y cuajamiento de frutos, especialmente que coincidan con períodos lluviosos, se pueden proteger en forma preventiva, mediante la aplicación de fungicidas a base de cobre (Oxicloruro, Hidróxido de Cobre u Oxido Cuproso) y Mancozeb, solos o en mezcla de tanque. También se puede adicionar cualquier aceite agrícola de origen vegetal al 1%, con el propósito de reducir la tasa de evaporación de las gotas asperjadas y mejorar penetración, cubrimiento y persistencia de los fungicidas. 5. Las aplicaciones de estos productos deberán realizarse preferiblemente con equipo motorizado de espalda, o equipos semiestacionarios motorizados.

CASTRO C., B.L.;LEGUIZAMON C., J.E.;LOPEZ R., J.A.;

1994

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